El pasado lunes tuvo lugar una Jornada sobre Derecho y Deporte en la sede del Comité Olímpico Español en la que se trataron asuntos de importancia para las federaciones autonómicas y nacionales, como el caso de la licencia única, la aplicación de la Ley de Transparencia y las ventajas públicas de las administraciones a determinadas entidades deportivas privadas y, en especial, los nuevos métodos de detección del dopaje.
El oncólogo pulmonar encargado de disertar sobre este asunto fue el Dr. D. Cristóbal Belda, joven y experimentado profesional en el tratamiento de células tumorales. Una de sus afirmaciones más rotundas tras sus trabajos experimentales en la empresa “Hospitales de Madrid” fue clara:” El dopaje produce cáncer. Se ha detectado que bastantes células cancerígenas reciben una fuerza exterior de grado alto cuando el cuerpo ingiere, por ejemplo, EPO, la sustancia de moda en el dopaje internacional. Ello redunda en su crecimiento, extensión y fortaleza”.
Muchas veces nos han hablado de la inconveniencia de la preparación farmacológica y de los riesgo de consumir productos que rayan los límites de lo permitido pero no es menos cierto que estas delimitaciones varían de año en año y que la AMA, Agencia Mundial Antidopaje (WADA, en sus siglas americanas), se ve obligada a modificar las listas porque sus investigadores habían ido casi siempre a remolque de los delincuentes.
Los estudios realizados por médicos españoles, con el Dr. Belda a la cabeza, ponen de manifiesto métodos de detección más precoces y evitan los enmascaradores de sustancias prohibidas. Sus investigaciones superan los defectos del denominado pasaporte biológico y evitan errores que puedan conducir a sanciones injustas. El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) tendrá que modificar sus parámetros para evitar sentencias como la de Alberto Contador, en clara contraposición al principio de presunción de inocencia y deberá acreditar la ingesta voluntaria de productos dopantes y sus posibles efectos cuantitativamente. Al mismo tiempo, sitúan a la medicina española a la cabeza de la lucha contra el dopaje con el respaldo absoluto del Comité Olímpico Español.