Queda apenas tres semanas para que se pronuncien en Buenos Aires las palabras mágicas y se cumpla un sueño. La Candidatura Olímpica de Madrid 2020 ha lanzado una campaña para captar 50.000 voluntarios, de los que me honro en formar parte, y ha llenado las redes sociales de una ilusión insospechada. Pueden inscribirse en voluntarios@madrid2020.es . Uno de los puntos fuertes de esta aspiración española de albergar los Juegos Olímpicos es el enorme respaldo popular que ha obtenido y que supera el 81% de la población. Por eso, apoyar esta campaña de voluntarios ayudará a enseñar al mundo que, de verdad, queremos organizar los Juegos.
Dentro de la asignatura de Periodismo que tengo el honor de impartir en la Facultad de Artes y Comunicación de la Universidad Europea de Madrid, los primeros temas del curso hacen referencia a la historia de los Juegos Olímpicos, tanto en la Antigua Grecia como en la reconstrucción del movimiento olímpico mediado el siglo XIX. Al principio, los alumnos se sorprenden con Pausanias o Arnold y abren los ojos desorbitados cuando explico que Homero fue, a mi juicio, el primer periodista deportivo de la historia… pero terminan por engancharse. Sigo y aconsejo las obras del profesor Conrado Durántez, a quien dedicaré mi próximo artículo como autoridad universal en la materia.
Los Juegos Olímpicos encarnan las virtudes más admirables. La Candidatura de Madrid 2020 persigue los ideales que ellos representan y tan solo entraña ventajas frente a ningún inconveniente. Si usted, amable lector, ama España y quiere los Juegos Olímpicos 2020, le recomiendo y solicito que se inscriba como voluntario y, al mismo tiempo, se lo agradezco.
#UnidosporunSueño