19 Jul, 2015

Elecciones en el FC Barcelona

Hace tiempo que las cosas fueron cambiando en el Barça, unas de manera paulatina, otras de forma más abrupta. El binomio Laporta-Rossell se partió en dos por las desavenencias que ambos fueron protagonizando y el de Rossell con Bartomeu se fracturó por las resoluciones judiciales. Lo cierto es que, a pesar de las fracturas entre los principales dirigentes, el primer equipo ha sabido mantenerse al margen de los vaivenes y ha resuelto con excelente criterio y resultados todos los conflictos exteriores al vestuario. Tan sólo una liga del Real Madrid y otra del Atlético en el mismo Camp Nou en la última jornada y por un solo gol, privó de hacer pleno de campeonatos al Barça.candidatos-Barça

Vistas así las cosas, los grandes clubes necesitan estabilidad, en realidad todos los clubes necesitan equilibrio en todas sus parcelas. Y la gestión resulta primordial para la salud económica, laboral, social y deportiva. Tampoco, en verdad, la permanencia de una junta durante un especio prolongado en el tiempo, garantiza la estabilidad ni el equilibrio, ni siquiera el acierto deportivo y hay ejemplos sobrados en la historia del fútbol español.

Conocí bastante a Jan Laporta en el periodo en el que fui Adjunto a la Presidencia del Real Madrid y he tratado menos a Josep María Bartomeu desde mi función de Asesor de Presidencia de la RFEF. Representan dos polos opuestos en la actividad diaria. Bartomeu es más prudente, más discreto, lo que se denomina de perfil bajo, y Laporta es un espectáculo andante, protagonista a la fuerza por su carisma y personalidad.

Bartomeu fue aprendiendo en el desarrollo de su trabajo mientras que Laporta llegaba aprendido con sus ideas rebeldes, nacidas en los tiempos del Elefant Blau y la gran oposición al nuñismo. Ambos podrán ser buenos presidentes, uno enarbola bandera política independentista y otro aúna sectores despolitizados del barcelonismo. Las encuestas daban inicialmente, a Bartomeu como favorito dado que partía desde el poder y con la ventaja de apuntarse varias renovaciones y fichajes. Laporta ha recortado posiciones en los últimos días aunque no sabemos si será suficiente. Solo la retirada del resto de candidatos permitiría ver un Bartomeu-Laporta, mano real del deseo de los aficionados y socios azulgranas.   Y no se esperan sorpresas.